• 14 de abril de 2024

PREOCUPANTE ÍNDICE INFLACIONARIO EN MARZO

El Índice de precios al consumidor en marzo de 2023 registró un alza mensual del 7,7%, lo que acumuló en el primer trimestre del año una variación del 21,7%. En comparación con el mismo período del año anterior, el incremento alcanzó un alarmante 104,3%. Estos datos preocupantes reflejan la persistente tendencia alcista de la inflación en el país.

La división que experimentó el mayor aumento en el mes fue Educación, con un incremento del 29,1%, debido a las subas en todos los niveles educativos al inicio del ciclo lectivo. Sin embargo, otras divisiones también mostraron aumentos significativos en el período. Prendas de vestir y calzado registraron un aumento del 9,4%, en coincidencia con el cambio de temporada, mientras que Alimentos y bebidas no alcohólicas tuvo un incremento del 9,3%, impulsado por los aumentos en Carnes y derivados, Leche, productos lácteos y huevos.

Dentro de la división de Bebidas alcohólicas y tabaco, los cigarrillos experimentaron un aumento del 8,3%, lo que también contribuyó al incremento en el índice de precios al consumidor. En la división de Vivienda, agua, electricidad y otros combustibles, los servicios de agua, gas y electricidad registraron un aumento del 6,5% en algunas regiones del país. En la división de Transporte, los combustibles y el transporte público también mostraron incrementos del 5,3%.

El aumento de Alimentos y bebidas no alcohólicas, con un 9,3%, fue el que más incidió en todas las regiones del país. Dentro de esta división, se destacó la suba de Carnes y derivados, seguida por Verduras, tubérculos y legumbres, Leche, productos lácteos y huevos, y Frutas, aunque con menor magnitud.

La persistente tendencia alcista de la inflación en el país preocupa a los consumidores y a las autoridades económicas. Los constantes aumentos en los precios de alimentos, educación, transporte y otros bienes y servicios, así como la variación interanual del 104,3%, representan un desafío para la economía del país. Las familias y los negocios enfrentan mayores costos y una disminución del poder adquisitivo, lo que impacta en la calidad de vida de la población y en la competitividad de las empresas.

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