En un rincón especial de la hermosa ciudad de Brinkmann, se encuentra un lugar que ha estado llenando de alegría y esperanza los corazones de los más pequeños durante los últimos 12 años. «Las Ranitas», un merendero que ha servido como punto de encuentro para niños y niñas de 4 a 12 años, celebra una docena de años de actividades ininterrumpidas, donde el deporte y la solidaridad se unen para brindar un refugio a quienes más lo necesitan.
Desde su inicio, «Las Ranitas» ha desempeñado un papel fundamental en la vida de los niños de Brinkmann, especialmente aquellos que provienen de familias de escasos recursos. Este merendero no solo les brinda un espacio seguro para divertirse y aprender, sino que también se ha convertido en un faro de esperanza y oportunidades para ellos.
Uno de los proyectos más destacados de «Las Ranitas» es su escuelita de fútbol, que ha sido un verdadero motor de desarrollo personal y colectivo para estos pequeños deportistas. Cada tarde, los niños se reúnen en el campo de juego, donde entrenadores apasionados les enseñan las técnicas del fútbol y, lo que es aún más importante, les inculcan valores fundamentales como el trabajo en equipo, el respeto y la perseverancia. Estas lecciones no solo se aplican en el campo, sino que también se llevan a casa y a la escuela, contribuyendo al crecimiento integral de estos jóvenes talentos.
La escuela de fútbol de «Las Ranitas» no solo se trata de patear una pelota o anotar goles, sino de crear un ambiente en el que los niños puedan fortalecer su autoestima, desarrollar habilidades sociales y aprender a enfrentar los desafíos de la vida con determinación. Este enfoque holístico ha dejado una impresión indeleble en las vidas de los participantes, quienes, a lo largo de los años, han logrado alcanzar sus sueños y superar obstáculos, en parte gracias a la formación y el apoyo que recibieron en este acogedor rincón de Brinkmann.